Ruperto Costa afirma que el cierre de esa especie en verano será muy dañina en su puerto -Diez cofradías de Arousa están a favor de la prohibición, y dos en contra
El patrón mayor de Cambados, Ruperto Costa, anunció ayer que intentará mediar con la flota que pesca chopo en la ría de Arousa para modificar el plan de veda estival para esta especie.
En una consulta reciente celebrada en las federaciones de cofradías de las provincias de Pontevedra y A Coruña, se votó la posibilidad de vedar la pesca del chopo durante todo el verano en la ría de Arousa. Diez pósitos se mostraron a favor de cerrar la pesquería en el periodo estival, y dos votaron en contra, Cambados y Carril.
Numerosos armadores de varios puertos de la ría de Arousa se reunieron el sábado en el muelle cambadés de Tragove para buscar una solución al conflicto. Se sienten muy perjudicados, pues afirman que nadie contó con ellos antes de pedir la veda, y que el chopo supone para ellos en verano un recurso económico muy importante. Además, alegan que en esa época del año el animal ya ha desovado, por lo que no habría motivos biológicos para el paro. Creen que una veda en verano solo beneficiará a los barcos que van al mar con el arte de los «trasmallos».
Ruperto Costa se pone de parte de los armadores que protestaron el sábado, y alude a la importancia socioeconómica que el chopo tiene en Cambados. «Somos la cofradía con mayor venta de chopo de Galicia». Añade que en su puerto hay unas 30 embarcaciones que trabajan con el arte del «boliche», y que para ellos el chopo solo es una especie complementaria. «No cogen demasiados kilos, pero esos kilos son los que marcan la diferencia entre que un día de pesca sea rentable o tener que amarrar», sugiere Costa.
El patrón mayor de Cambados afirma que, «se va a hablar con el sector para intentar reconducir la situación», y afirma que su postura particular es la de que el chopo no necesita una veda. «Pero si hay que hacerla, replanteemos las fechas», propone. En este sentido cree que se podría barajar parar la extracción a finales de verano o principios de otoño. «Podemos intentar establecer unos meses más acordes con la realidad, y en los que la veda no perjudique a nadie».
Diez contra dos
En la ría de Arousa se vedó el chopo por primera vez en verano el año pasado, pero se hizo solo en la parte interior de la ría. Este año se puso sobre la mesa la misma opción, y votaron a favor del parón extractivo 10 cofradías, y en contra solo dos.
El presidente de la Federación de Confrarías de Pontevedra, José Manuel Rosas, recuerda que no siempre llueve a gusto de todos. «Las decisiones se toman por consenso, y si no se llega a consenso, hay que votar. Es democracia, ni más ni menos». Sobre lo sucedido en este caso concreto, Rosas recuerda que, «hubo una reunión, cada uno defendió su postura y se votó… Cuando se toman este tipo de decisiones siempre hay el riesgo de que haya algún sector perjudicado». En cualquier caso, el presidente de las cofradías de Pontevedra asume que aún puede haber cierto margen de negociación y mejora de la propuesta si alguien aporta un plan alternativo.
José Manuel Rosas comprende que gestionar una veda como la del chopo en la ría de Arousa es más difícil que en las demás por la gran variedad de artes y oficios de la flota y el gran número de barcos de todos los puertos. En cualquier caso, y sin ánimo de querer influir en las posturas, Rosas está convencido de que las vedas son necesarias. «Hay que recordar el pasado y tener visión de futuro. Poco a poco, el recurso disminuye y hoy tenemos medios para pescar mucho más de lo que pescaban nuestros padres».
Finalmente, el presidente de la Federación Galega, y patrón mayor a su vez de Ribeira, José Antonio Pérez, aduce que la petición de vedar el chopo durante el verano en la ría de Arousa nació precisamente en los puertos del sur. Pero el año pasado solo se impidió la pesquería en la parte interior de la ría, «y después la flota se concentró toda en la zona exterior».
Los armadores del norte de la ría no querían que este verano volviese a pasar lo mismo, de ahí que votaron sí a la veda, pero con la condición de que afectase a la totalidad de la ría. Por ello, no terminan de comprender el malestar suscitado ahora en el sur.
«Mi misión en la Federación se limitó a consultar la medida con todas las cofradías y trasladar una propuesta a la Consellería do Mar», que es la que resolverá.
Fuente: Faro de Vigo