Los muestreos realizados a finales de la pasada semana confirman los peores augurios; ayer se fijaron topes de captura bajos y cuatro días de trabajo semanales
«Mala, mala, mala». Repitiendo esa palabra pretendía ayer Juan Rial Millán, presidente de la asociación Rañeir@s ría de Arousa, enfatizar lo nefastas que son las previsiones para la próxima campaña de libre marisqueo en la ría. Que no iba a ser buena se sabía desde que el primer muestreo en Os Lombos do Ulla había dejado claro que allí no hay nada que rascar. Pero los datos de O Bohído y O Cabío no han dado al sector ni un balón de oxígeno: el primero de los bancos está agotado y el segundo, como suele ser habitual en los últimos años, tampoco responde.
El contexto es tan malo, que en una reunión celebrada ayer por los patrones de las cofradías integradas en Rañeir@s se acordó que este año la campaña no comenzará el 1 de octubre, como suele marcar la tradición. La flota deberá esperar hasta el día 18 de octubre antes de poder salir a trabajar con el raño en las zonas de libre marisqueo.
Se empezará a trabajar tarde, y se hará, además, solo cuatro días por semana; de lunes a jueves, el viernes «a xente que queira poderá ir a outras zonas de libre marisqueo». Además, los topes serán bajos. Así que en O Bohído se podrán extraer 3 kilos de babosa, medio de fina, uno de japónica y de rubia, otro de carneiro y cinco de reló. En Cabío, los mariscadores podrán extraer o 15 kilos de roja o 3 de babosa; a los que se podrán sumar uno de japónica, uno de carneiro, medio de fina y cinco de reló. También se han fijado topes para Os Lombos, aunque aquí hay poca confianza en que nadie logre hacerlos. En cualquier caso, se han establecido en cinco kilos de berberecho, cuatro de japónica, uno de babosa y medio de fina.
«Complicado de coller vai ser todo, porque non hai ningunha especie que estea ben. As mostraxes que se fixeron é o que din», explicaba ayer Juan Rial Millán en referencia a la situación del banco situado en la desembocadura del Ulla. De hecho, considera que los barcos abandonarán pronto esa zona porque no encontrarán en ella marisco que extraer. Así que, de nuevo, «toda a campaña estará enfocada a O Bohído». No son buenas noticias para un área que, pese a ser muy extensa, «non é produtiva en toda a súa superficie». Eso provocará que un año más, y ya van unos cuantos seguidos, la flota se concentre en las zonas de O Bao en las que el marisco crece, castigándolas.
Rial Millán es consciente de que los topes fijados y los días de trabajo pactados van a ser acogidos con frialdad por el sector del raño arousano. «A situación é a que é. Temos que tomar medidas para intentar evitar que os bancos sigan indo a peor e queden aínda máis danados para o ano que vén», señala el presidente de Rañeir@s.
Fuente La Voz de Galicia