Navaja, almeja y berberecho están sufriendo el efecto de las lluvias
A lo largo del día de hoy, un equipo de biólogos visitarán los parques de cultivo de Carril para tomar muestras y analizar los niveles de mortandad del marisco que allí se dan. Tras largos días de salinidad bajo mínimos, los parquistas saben que la situación no es buena, pero desde la OPP-89 quieren conocer el escenario al detalle. Por eso, hoy recibirán una primera visita técnica, que será necesario volver a repetir dentro de unos días, en la próxima marea. «Aínda hai moito marisco que está moi debilitado e que acabará morrendo», explica José Luis Villanueva. De hecho, los efectos del embalsamiento de agua dulce en la zona de los parques se seguirá viendo a medio plazo, ya que es probable que la almeja que sobreviva ahora quede tocada y no logre superar la primavera.
«A natureza, as veces, danos estes zarpazos», señalaba ayer el que también es patrón mayor de Carril. Los excesos de lluvias son un problema, pero en la desembocadura del Ulla el sector sospecha de otros, que derivarían del embalse de Porto de Mouros. La firma que gestiona esta presa de aprovechamiento eléctrico niega alterar los caudales del río —solo tiene un aliviadero, no hay compuertas— y también niega el vertido de los lodos que han llegado a la ría. En Carril y en Rianxo no las tienen todas consigo. En este contexto hay que interpretar la visita que un equipo de biólogos realizará hoy: «Queremos saber que mortandade houbo e intentar determinar as causas e que é o que está a pasar», explica Villanueva, apuntando a una posible reclamación futura. En Rianxo, de momento, esperan: Miguel Iglesias, el patrón mayor, señaló que será en la próxima semana cuando acudan a revisar los bancos para comprobar cómo está la situación en ellos. No esperan nada bueno.
Y no es de extrañar, porque el fondo de la ría es la zona que sufre con mayor intensidad los efectos del agua dulce. Pero no es el único. En A Illa, las mariscadoras han detectado en las playas problemas con algunas especies, especialmente la almeja fina, según explicó el patrón mayor, Juan Millán Rial, y en Vilaxoán las trabajadoras del sector de a pie también han detectado problemas en varias zonas, especialmente en O Preguntoiro y Corón.
El escenario se repite en otros puntos de la ría. En Cambados, curiosamente, no se han registrado mortandades importantes en las zonas más próximas a la desembocadura del río Umia, según los muestreos realizados por el biólogo de la cofradía. Con el banco de O Sarrido sano y salvo, la preocupación parece concentrarse en al zona de O Varal, donde sí parece haberse registrado mortandad de navaja y almeja babosa.
Fuente: La Voz de Galicia